Despegan las naves en Spaceport America

Acceso general a las instalaciones del Spaceport America. Imagen: Nigel Young

Hace ya un año, se ha terminado la primera terminal espacial que la empresa Virgin Galactic ha estado construyendo en Nuevo Méjico. Este espaciopuerto es el primer edificio de estas características que se construye en nuestro planeta. Spaceport America ha sido diseñado por Foster+Partners en colaboración con SMPC Architects y URS Corporation.

Desde esta impresionante instalación, situada a 80 kms al norte de la localidad de Las Cruces, parece que los primeros turistas espaciales empezarán a partir próximamente hacia las estrellas. Solo en los Estados Unidos están en marcha otras 9 iniciativas parecidas. Todo un símbolo radiante que es representativo del interés de los más acaudalados por abandonar el planeta -en cuanto se pueda- en busca de nuevos horizontes más estables y placenteros. Serán privilegiados viajeros que podrán experimentar por primera vez la gravedad cero al mismo tiempo que disfrutar de la visión de la tierra desde una perspectiva insólita, la que hace comprender la extremada finitud de nuestra casa en el universo.
Un capricho solo al alcance de unos pocos que pueden pagar los 200.000 US $ que cuesta el billete individual. Según sus propias afirmaciones, la empresa, Virgin Galactic, cuenta ya con más de 500 reservas. Una cifra demasiado redonda para ser creíble, aunque coincide con ese optimismo congénito que exhibe su promotor Richard Branson en cualquier circunstancia.
Según señalan los propios promotores, la forma del edificio se ha inspirado en el logo del grupo de empresas Virgin. Se presenta como una instalación sinuosa “que captura el drama y misterio de los viajes espaciales” y, como es habitual en este tipo de iniciativas de negocio, se hace una declaración genérica del carácter ambientalmente responsable del edificio que se inscribe en su entorno desértico como una forma natural que genera un impacto mínimo. Más allá de las palabras grandilocuentes, esta construcción es una estructura convencional, barata y simple, formada por dos grandes conchas simétricas de estructura metálica que actúan como hangares, destinados a albergar los vehículos que han sido especialmente diseñados para esta aventura espacial.

Susana Martínez, gobernadora del estado de Nuevo México y Sir Richard Branson, presidente dela empresa VirginGalacticen la ceremonia de inauguración de la terminal espacial.

La propuesta diseñada por Foster rememora vagamente a la magnífica terminal TWA de Nueva York que Eero Saarinen construyera en 1962. Toda una contribución a la imaginería de hazaña de descubrimiento que concuerda con la estrategia global de marketing elaborada para atraer a clientes de todos los confines del globo.
Nuevamente, este proyecto se presenta como un ejemplo más de la contribución de las grandes consultoras de arquitectura contemporánea a las estrategias de marketing para el lanzamiento de productos. El éxito en la difusión de esta iniciativa comercial ha sido espectacular, habiendo sido presentada por innumerables medios alrededor del mundo.
La creciente hegemonía y fascinación que ejerce la imagen en el mundo contemporáneo ha ido reduciendo el papel de los arquitectos y la arquitectura a meras herramientas al servicio de la mercadotecnia más ramplona. Constructores de imágenes atractivas que emplean herramientas de dibujo tridimensional para generar edificios banales, fácilmente ejecutables y consumibles.

Como ocurre en este caso.