Vivir lujosamente en Beverly Hills

Casa en Laurel Way, Los Angeles. Whipple Russell Architects, 2013

Mientras en extensas partes del planeta se vive la pobreza más extrema, una selecta minoría sigue fascinada por el lujo más intenso. Es lo que ocurre a los propietarios de las casas que proyecta actualmente el equipo de arquitectos californiano Whipple Russell en el selecto barrio de Beverly Hills en Los Ángeles.

El encaje paisajístico de la vivienda en su entorno

En un lugar llamado Laurel Way, uno de esos típicos millonarios que habitan la ciudad de Los Ángeles se ha construido esta fastuosa mansión que según se comenta en la red ha costado treinta y seis millones de dólares. Es un ejemplo de cuáles son los tics y recursos formales que se valoran hoy entre los que tienen riqueza suficiente para construir este tipo de arquitecturas, expresivas de su gran poder económico.

Es un edificio de dos plantas que se adapta escrupulosamente a un pequeño promontorio y que ofrece vistas espectaculares sobre la llanura en que se asienta la ciudad de Los Ángeles. Sobre una sinuosa plataforma escalonada que mimetiza las curvas de nivel del lugar, el proyecto ha definido una estructura en U alrededor de un gran patio de entrada que centraliza los accesos. El conjunto de construcciones que conforman la casa tiene su punto focal entre ese patio y la terraza con piscina que se coloca en un extremo de la parcela proyectada sobre el horizonte. Por otra parte, los largos planos horizontales que forman los forjados del edificio -rematados en blanco- contribuyen a mimetizar la gran superficie construida en el paisaje inmediato.

Los arquitectos no han dado a conocer sus plantas de distribución que definen el proyecto (probablemente a petición del cliente o por razones de seguridad) por lo cual su interpretación está sujeta a especulación. Interpretando las fotografías se percibe que la entrada se produce bajo el edificio, generándose un pórtico que alberga una escalinata de acceso y una rampa para vehículos. Más allá del mismo, por lo que se puede ver en el patio interior que da acceso, a la izquierda se ha colocado un pabellón para albergar el inmenso garaje acristalado destinado a cobijar al menos tres vehículos deportivos y de gran lujo. La planta baja de la casa es una sucesión de vestíbulos, comedores y estancias de recepción en contacto con la gran terraza y los espacios exteriores que la circundan. Junto a la entrada, probablemente se colocan los espacios de apoyo, cocina, etc. .En su segunda planta retranqueada, se sitúan los dormitorios principales y sobre el garaje los de los posibles invitados. Siempre abiertos totalmente al paisaje circundante.

Es una arquitectura de volúmenes cúbicos que se maclan para dar lugar a una composición de una cierta riqueza espacial, de texturas y planos intersectados. De alguna manera, se aplican aquí, nuevamente en una reiteración contemporánea, las ya lejanas estrategias neoplásticas que Mies van der Rohe experimentara por primera vez en su conocido proyecto para una casa de ladrillo de 1924.

Los espacios habitados se encierran a través de largos paños de cristal que recorren extensivamente los planos de fachada, estableciendo una relación de transparencia casi total entre interiores y exteriores. En algunos casos, podemos reconocer una clara correspondencia con las famosas Case Study Houses que pioneros californianos como Craig Elwood y Pierre Koenig hicieron también en la estela de las experiencias de Mies en América. En este caso, constatamos esos recursos arquitectónicos, espaciales y formales, que patrocinó John Entenza en su revista Arts&Architecture entre 1945 y 1960 y que siguen siendo utilizados cuarenta años después.

Vista del patio de acceso a los espacios de la casa
La formalización de las transparencias en el espacio habitable para la incorporación de las vistas exteriores

La casa se circunda por un pequeño ribete de agua que establece una franja neta de separación entre ese lujoso universo en el que viven estos propietarios y las irregularidades que define la vegetación y el paisaje. En la posición culminante, este artilugio se amplia para conformar la gran plataforma de piscina y terraza frente al paisaje urbanístico y vegetado del sur de California, que toma a las torres del Downtown como punto focal de la composición. Es curioso que, actualmente, gran parte de las nuevas viviendas de gran lujo acuden a este elemento constructivo de la lámina de agua que se confronta limpiamente contra el paisaje. Puede entenderse como una conjuración de la abstracción y como una forma de poner en valor la percepción del territorio. Algo que siempre añade valor a este tipo de arquitectura.

El recurso a la disposición estratégica de piezas de arte y la adición de vegetación y pequeños fuegos centrados en laminas de agua, acaban de establecer contrapuntos colorísticos que enfatizan la idea de lujo sofisticado que los arquitectos buscan expresar.

Diversas vistas de los espacios interiores

Ver estos alardes arquitectónicos reflejados en fotografías intensamente estudiadas y en los que la iluminación contribuye a definir el carácter propagandístico, no deja de ser una experiencia estética intensa que eleva la satisfacción de los clientes de estos arquitectos. es una forma de estimular la envidia como una componente residual del poder. Hoy en día, el arquitecto que aspire a trabajar para este tipo de clientela debe ofrecer elementos de venta dinámicos como el video de proyecto que permite experimentar el espacio con anticipación. Les mostramos un ejemplo de estos mismos arquitectos.