Las construcciones salvajes de Chapuisat

La extraña terraza de la Residence Secondaire. Chapuisat Frères , 2012

Hay gente que dedica su vida a cultivar la subjetividad del pensamiento. Es lo que ocurre con Chapuisat Frères, un equipo de dos artistas instalado en la apacible y conservadora ciudad suiza de Ginebra, y que toman la transformación del espacio como un motivo para su trabajo de investigación creativa.

Maison, Chapuisat Frères, 2008

En apenas una década, Chapuisat Frères ha generado una serie de obras muy significativas, que representan su peculiar aproximación a la escultura basada en la reconfiguración de la percepción del espacio. En sus provocadores trabajos demandan una participación activa al espectador, colocándole en una tesitura de exploración, como ocurre en los laberintos interiores visitables que se sitúan dentro de las paredes. Es lo que sucede en la instalación denominada Intramuros, proyecto realizado en varios lugares de Suiza, como la Kunsthalle de Sanktgallen en 2008. La obra no está sobre las paredes -o en el espacio que se puede visitar habitualmente- sino que se sitúa dentro de los propios muros que conforman el espacio expositivo. Frente a las prístinas galerías de arte a las que tanto se acostumbre, en las que las obras se colocan sobre impolutos lienzos blancos de fábrica, esta pieza plantea la introducción de nuevas paredes de ancho suficiente para que puedan visitarse interiormente, creando un recorrido inimaginable para el espectador.

Metamorphose d’impact 2. Le LIFE. Le Grand Café. Saint Nazaire. 2012

Y es que sus obras tratan de romper ideas preconcebidas trastocando las convenciones familiares de lo que es la arquitectura o la escultura. Y, con ello, de la forma en que usamos los espacios. Invitan a un nueva manera de entender el territorio cotidiano que nos rodea, rompiendo hábitos y costumbres muy arraigados. Como ellos mismos exponen “nuestras construcciones reconfiguran el espacio, convirtiendo los límites entre interior y exterior de adentro hacia afuera, jugando con la apreciación subjetiva de la realidad”.

Algunas instalaciones recientes suponen una transgresión radical de la forma en que se habitan los lugares como la denominada Residence Secondaire (Segunda Residencia). Una obra radical de 2012 que se superpone salvajemente a un típico chalet suizo y que parece haber explotado finalmente, recubierto de tablones que se proyectan en todas las direcciones sobre su tradicional cubierta. Pero es que esta nueva construcción a modo de parásito puede habitarse y recorrerse de una forma poco convencional por medio de escaleras y recintos funcionales. Es una rotura inimaginable de las convenciones que sus vecinos deben considerar una afrenta intolerable.

La Residence Secondaire en su apacible entorno suizo

En Chapuisat Frères, la frontera entre arquitectura y escultura ha quedado definitivamente abolida. Y frente a la impotencia de los arquitectos esclavizados por la economía y la funcionalidad habituales en una cultura contemporánea dominada por el capital, los escultores han llegado para apropiarse de la vertiente artística en el manejo del espacio.

En el fondo esta pareja son unos provocadores que buscan activar en el observador reacciones ambiguas de rechazo pero también asombro, curiosidad y extrañamiento. Una manera como otra cualquiera de llamar la atención en un mundo saturado de imágenes y acontecimientos. Sin embargo, su trabajo creativo refleja una frescura y una profundidad de pensamiento que es probablemente el resultado de un proceso altamente innovador y nada sencillo.

Intramuros. Kunsthalle de Sanktgallen, 2008