Urbanización Las Alondras. Otura, Granada. 2008
Hace ya más de cinco años que se produjo la debacle del sector inmobiliario español. Un acontecimiento financiero que generó cadáveres edificados por doquier. Julia Schulz-Dornburg es una arquitecta y fotógrafa alemana que se ha dedicado a levantar un acta visual de este descalabro sufrido en numerosos sitios del territorio nacional.
Dominion Heights. Estepona, Malaga. 1998
Ruinas modernas, una topografía del lucro es el resultado del esfuerzo realizado por Julia Schulz durante una larga temporada de trabajo. Un documento melancólico que nos muestra unos territorios heridos por la mano del hombre, plagados de construcciones abandonadas que están empezando a ser invadidos nuevamente por la vegetación. Lugares fantasmagóricos que bien podrían ser el resultado de una extinción de dimensiones colosales.
Algunos hemos presenciado ya la explosión de varias burbujas inmobiliarias en este país. Como la que tuvo lugar en la de finales de la década de los 70 del siglo pasado que dejó también innumerables urbanizaciones fantasmas en las costas turísticas. O la que se produjo con la crisis económica de principios de los noventa que, però, volvió a arrancar con relativa facilidad añadiendo nuevos edificios y ocupando más espacio. Pero ninguna iguala la ocurrida en el año 2007, resultado de una especulación desaforada y sin precedentes, aplicada a los distintos territorios que componen España.
Con una voluntad de taxidermista esta fotógrafa nos enseña algunos ejemplos de esas urbanizaciones abandonadas que cuentan con sus infraestructuras realizadas, calles, aceras y farolas y que no han visto pasear a nadie todavía. En ciertos lugares, el abandono ha alcanzado también a numerosos edificios, transformados en ruinas instantáneas, construcciones detenidas en un momento impreciso. Casi como si hubiera ocurrido un cataclismo imprevisto.
Para concretar este trabajo la autora emprendería un viaje de aprendizaje y búsqueda a lo largo y a lo ancho de la geografía de la península ibérica y también de las islas. Clasificando, fichando y observando elementos y rasgos comunes que ofrecen grandes similitudes. Sorprende la recurrente similitud formal de las soluciones de urbanización y edificación, Pareciera como que la dinámica del capital especulativo fuera incapaz de vislumbrar propuestas imaginativas y diversas, más allá de recurrir a un falso costumbrismo de tejados y paredes encaladas; de pensar una urbanización diferente a la infinita repetición de viviendas unifamiliares y cintas de asfalto pobremente desplegadas. Aunque cada parcela individualizada se identificada con su caja frontal para albergar los contadores de las instalaciones que, a modo de lápidas, nos remiten a un sueño fracasado de independencia y disfrute de una naturaleza soñada por unos hipotéticos compradores que nunca llegaron.
Diseño urbanístico para Urcamusa Norte. La Muela, Zaragoza. 2009
Lo que si hicieron los responsables de esta catástrofe es el cálculo preciso del beneficio a obtener dentro de los parámetros normativos al uso. Incluyendo las exactas cesiones de suelo para dotaciones públicas y el mínimo despliegue de viario. Como refleja la urbanización Urcamusa Norte que se adapta como un guante a la topografía horizontal adaptando sus límites a la línea que definen los montes vecinos, para encajar el máximo número de parcelas exactamente iguales y proponiendo una franja uniforme de viario y espacios libres que sigue exactamente el trazado sinuoso que define su calle de acceso. Y es que en este desaguisado han colaborado insignes urbanistas españolas como AUIA en el diseño del fracasado Reino de Don Quijote en Ciudad real que ocupa más de 350 hectáreas o la urbanización Mirador del Ebro realizada en L’Aldea de Tarragona con proyecto de i3 Consultores y Eduardo Leira.
Lo más increíble es la pobreza intelectual de las denominaciones y reclamos publicitarios con los que se quería colocar el “producto”. Pero también el cinismo y descaro con que improvisados promotores de todo tipo dieron carta de naturaleza a operaciones de una codicia sin límites.
En medio del campo de Otura, Granada, se encuentran los prototipos que se degradan dela UrbanizaciónLasAlondras, “una inversión excelente para los amantes de la naturaleza y los deportes”. O los desgarros topográficos de un promontorio cercano a Águilas, bautizado como Isla del Fraile Resort y destinado a que puedas “volver a los orígenes” en un entorno privilegiado. Una promoción que obtuvo en 2006 el improbable Premio Ceclor a la ejemplaridad en la protección medioambiental y la promoción sostenible de la edificación.
Las fascinantes imágenes de Julia Schulz-Dornbuch nos relatan esos paisajes de la desolación que nos enfrentan al consentimiento y la inacción colectiva frente a la avaricia desaforada de unos pocos. Es una incisiva visión personal que nos devuelve a una realidad de sufrimiento y escasez motivada por el despilfarro que se relacionan con esa disciplina onírica y surreal que es la economía contemporánea. Y nos emplazan en una indignación individual ante la incapacidad colectiva para detener semejantes desafueros.
Los árboles que se salvan del trazado urbano en la urbanización La Ladera. Pelabravo, Salamanca. 2007. Ortofoto de Google Maps
Como dice Joan Fontcuberta, citado en uno de los textos del libro, “toda fotografía solo refleja una parte de la realidad, y por lo tanto, miente. Lo que importa es mentir bien” Durante muchos años, nos han mentido masivamente a los habitantes de este país y nosotros hemos creído fervientemente en esa ilusión. En este libro se nos ofrece una visión descarnada de esa realidad, esperemos que sirva para comprenderla. E impulsarnos a actuar para corregir y evitar semejantes excesos en el futuro.
Més informació:
Ruinas modernas, topografía del lucro. Página de Julia Schulz Dornburg
Spain mon amour/Ruinas Modernas. Exposición en Fundación ICO de Madrid Abril-Junio de 2013
Exposición en Aedes Gallerie. Berlin, Març de 2013
Residencial Alba marina. Alba de Tormes, Salamanca. 2004
Complejo turístico y de ocio Calatrava. Villamayor de Calatrava, Ciudad Real. 2008
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