Los muelles de Nueva York imaginados por Windsor McCay en su serie Little Nemo in Slumberland
Los arquitectos siempre tenemos una predilección por algunas obras del comic, ese arte que nos narra historias mediante una hibridación entre el dibujo y las descripciones escritas.
Nacido como un complemento periodístico a mediados del siglo XIX, es un arte basado en la secuencia de imágenes dibujadas que nos presenta realidades enmarcadas en el paisaje, las ciudades y la arquitectura. De ahí su interés para los profesionales de la construcción.
Las historietas dibujadas han evolucionado para presentar universos de ficción altamente sofisticados en los que la arquitectura y el territorio soñado adquieren un papel protagonista. Como ocurre con las aventuras del pequeño Nemo en una ciudad de Nueva York soñada. O con el Príncipe Valiente de Harold Foster que nos relata una Alta Edad Media idealizada a partir de un riguroso enmarque de los elementos históricos conocidos. O también, los paisajes interplanetarios y ciudades futuristas que con tanto realismo dibujó el francés Moebius hasta hace muy poco.
El siguiente artículo titulado Espacio y lugar en el arte del comic profundiza en esos caracteres peculiares que el comic presenta para la arquitectura.
Más información:
Espacio y lugar en el arte del comic. Arquiscopio PENSAMIENTO
Le Voyage d’Hermés. Moebius, 2011
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